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Licenciada en Comunicación y Máster en Periodismo. Actualmente, redacto contenidos sobre medicina y cirugía estética, belleza, salud y bienestar.
El J-Plasma es una tecnología innovadora en el campo de la estética que está generado un gran interés por su capacidad para mejorar el tejido cutáneo y reducir los signos del envejecimiento. En este artículo, exploraremos las modalidades y usos que tiene este tratamiento, conoceremos el perfil de los candidatos ideales y también, las principales características de este tratamiento.
El J-Plasma es una tecnología avanzada que combina la radiofrecuencia con un flujo de helio ionizado, creando lo que se conoce como “plasma frío”. El plasma, una vez aplicado, estimula la regeneración celular, favoreciendo de esta manera, la retracción de las fibras grasas. Durante el tratamiento, se elimina una parte de la dermis más superficial para dejar espacio a la regeneración cutánea y a la reafirmación de la piel subdérmica. Como resultado, se observa una piel más firme, tersa y joven.
El tratamiento con J-Plasma debe ser realizado por un especialista estético cualificado y puede realizarse en régimen ambulatorio. Aunque se trata de un procedimiento mínimamente invasivo, es necesario someterse a exámenes preoperatorios.
El tratamiento se realiza de la misma forma que una lipoescultura Vaser, es decir, el dispositivo J-Plasma se aplica sobre la zona a tratar mediante un aplicador o sonda llamada Renuvion que libera plasma frío y de esta manera, el plasma penetra profundamente en la piel.
El procedimiento no es invasivo y suele requerir poco tiempo de aplicación. Recomendamos de 5 a 10 días de reposo después del procedimiento y llevar una faja de compresión para ayudar a cicatrizar la zona tratada.
El J-Plasma es especialmente versátil y puede utilizarse para tratar diversos problemas cutáneos, como el estiramiento de la piel o el estiramiento corporal. Al estimular la producción de colágeno y elastina, el J-Plasma ayuda a crear una retracción cutánea que favorece un aspecto más firme y remodelado. Además, esta tecnología es especialmente adecuada para tratar zonas de difícil acceso, como la cara interna de los muslos, el cuello o las nalgas.
Al ser un tratamiento mínimamente invasivo, tiene varias ventajas asociadas:
El tratamiento con J-Plasma está indicado para hombres y mujeres que deseen mejorar la calidad de su piel.
No se suelen atribuir problemas particulares en el post tratamiento con J-Plasma. Sin embargo, se recomienda tomar analgésicos para evitar hematomas y dolor en la zona tratada. Además, los especialistas también recomiendan llevar una faja para comprimir la zona y realizar masajes drenantes que ayudarán a la cicatrización.
A continuación se indican algunas de las afecciones especiales para las que es aconsejable consultar al médico de cabecera antes del tratamiento.
Los precios del tratamiento con J-Plasma pueden variar en función de la zona a tratar, de las sesiones que requiera cada paciente y también de la ubicación de la clínica o del consultorio del especialista. Es aconsejable hablar de los detalles financieros con el médico o el centro antes de proceder con el procedimiento.
En conclusión, el tratamiento estético con J-Plasma representa una revolución en el mundo de la regeneración cutánea. Su capacidad para mejorar el tejido cutáneo sin intervención invasiva lo convierte en una opción atractiva para quienes buscan resultados eficaces y de aspecto natural.
Bibliografía
Plasma (para renuvión), Instituto Italiano de Estética, último acceso 14/02/2024.
La información que aparece en Multiestetica.mx en ningún caso puede sustituir la relación entre el paciente y el médico. Multiestetica.mx no hace apología de un producto comercial o de un servicio.